Eli Lilly (NYSE:LLY) elevó sus proyecciones financieras anuales, impulsada por la enorme demanda de sus populares tratamientos contra la obesidad, lo que permitió al fabricante farmacéutico superar las expectativas del mercado en el tercer trimestre.
La compañía ahora prevé ingresos anuales de entre 63,000 y 63,500 millones de dólares, frente a una proyección anterior de 60,000 a 62,000 millones. Según estimaciones de Bloomberg, los analistas esperaban un pronóstico de 61,690 millones de dólares.
Las utilidades ajustadas anuales se estiman ahora entre 23 y 23.70 dólares por acción, frente a una guía previa de 21.75 a 23 dólares.
El mayor grupo de salud del mundo por valor de mercado registró ingresos trimestrales de 17,600 millones de dólares, un aumento de 54% respecto al año anterior y por encima de las previsiones de 16,070 millones, impulsados en gran parte por la fuerte demanda de Zepbound, su tratamiento para pérdida de peso.
Las prescripciones de Zepbound, aprobado por primera vez en 2023, ya superan a las de Wegovy de su competidor danés Novo Nordisk (NYSE:NVO), a pesar de que este último contaba con varios años de ventaja en el mercado de medicamentos GLP-1.
Las ventas del medicamento para la diabetes Mounjaro alcanzaron 6,520 millones de dólares, también por encima de lo esperado.
Lilly reportó ganancias ajustadas de 7.02 dólares por acción, muy por encima de los 1.18 dólares de hace un año y de la estimación de 5.69 dólares, según datos de LSEG citados por Reuters.
Las acciones de la farmacéutica subieron más de 5% en las operaciones previas a la apertura del mercado estadounidense el jueves.
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