Los inventarios de crudo en Estados Unidos registraron una caída la semana pasada, según la Administración de Información Energética (EIA), aunque el descenso fue menor al pronosticado por los analistas.
La EIA informó que las reservas comerciales de crudo disminuyeron en 607,000 barriles, por debajo de la caída esperada de 800,000 barriles. En comparación con la fuerte disminución de 9.285 millones de barriles reportada la semana anterior, la reducción moderada de esta semana sugiere un ritmo más lento en el retiro de crudo.
Los niveles de inventario de petróleo crudo son seguidos de cerca porque influyen en los precios de los combustibles y en la inflación. Normalmente, un aumento en las reservas indica una demanda más débil y presiona a la baja los precios, mientras que la caída de los inventarios refleja un consumo más fuerte, respaldando precios más altos.
“La caída menor a la anticipada esta semana señala una demanda más débil de lo esperado,” indicaron analistas, “pero la reducción continua, aunque más lenta, confirma que el consumo de crudo se mantiene constante.”
Inversionistas y observadores del mercado estarán atentos a los próximos informes de la EIA para determinar si esta tendencia continúa, ya que los datos ofrecen información clave sobre la demanda energética en EE. UU. y la economía en general.
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